domingo, 24 de marzo de 2013

Danger's Back - Capitulo 24


“I’m so going to hell for this,” - “Voy a ir al infierno por esto,”


Justin’s Point of View:

Cuando Bruce aparcó el coche, tomé una profunda respiración, relajándome en el asiento de piel mientras miraba hacia afuera. La puerta delante venía a la vista, las luces dentro estaban brillando desde el interior, proyectando un pequeño resplandor. Solo unos metros de distancia, Spencer estaba de pie con sus manos colocadas en frente de él, sus ojos duros mientras ellos miraban al frente, las orejas estaban alerta ante las cosas que ocurrían alrededor de él.

Frunciendo el ceño, tiré del pestillo, abriendo la puerta del coche. Saliendo afuera en los fuertes vientos, la cerré de golpe, caminando por el camino de entrara que conducía a la puerta principal.

“Justin,” El saludó con un simple asentimiento de su cabeza en mi dirección.

“Spencer,” Reconocí en respuesta, enderezándome. “¿Como esta ella?” Murmuré, Spencer inmediatamente reconoció de quien estaba hablando.

“Ella esta un poco nerviosa.”

Suspirando, inclinando mi cabeza hacia atrás, esperando oír esa respuesta, “Esta bien,” Cogiendo de él el bastón que me ayudaba a caminar, tiré de mi chaqueta, “Esconde esto por mi.” Ordené, sin ni siquiera esperar una respuesta mientras caminaba delante de él hacia la puerta principal.

Abriéndola, gemí mientras entraba dentro, el frío desaparecía detrás mientras el calor envolvía mi cuerpo, dándome la bienvenida a mi casa.

Antes de que tuviera la oportunidad de decir una palabra, _____ echó su cabeza alrededor para ver quien era, cuando sus ojos se posaron en mi. Levantándose, ella corrió, “Pensé que nunca llegarías aquí.” Ella sonrió, aunque las líneas alrededor de sus ojos me decían que ella había estado extresando durante la última hora desde que yo me había ido, “¿Tienes frío? ¿Estas bien? ¿Te duele algo? ¿Quieres algo de beber? ¿Quieres ir a la cama? ¿Estas cansado?” Sus preguntas vinieron una tras otra, sin ni siquiera tomar un respiro por en medio.

Riendo suavemente, sonreí, tomando sus pequeñas manos en las mías mientras ella se quedaba de pie en frente de mi, sus ojos marrones miraban a los míos, “Dame un poco de espacio aquí, ¿lo harás?”

Sonrojándose de vergüenza, _____ se apartó, dejando caer su cabeza de manera que su cabello hacía una cortina alrededor de su rostro para esconder sus mejillas ardientes. “Lo siento.”

Colocando mi dedo debajo de su barbilla, llevé de nuevo su cabeza hacia arriba para encararme. Inclinándome, coloqué un suave beso en su nariz. “Esta bien.”

Metiendo su pelo detrás de su oreja, _____ lamió sus labios, “Bienvenido a casa,” Ella sonrió ligeramente, sus ojos brillaban con felicidad.

“Gracias,” Susurré, dejando ir su barbilla mientras caminaba por delante y hacia el living. “¿Donde están los chicos?” Pregunté mientras miraba alrededor.

“Oh, uhm, ellos se fueron hace un rato,” Girando sus dedos juntos, ella miró desde donde ella estaba de pie hasta que mi confusa mirada se encontró con la suya.

Frunciendo mis cejas, ladeé mi cabeza hacia un lado en asombro, “¿Porque?”

“Ellos dijeron que querían dejarnos solos desde que acabas de regresar del hospital, y ellos no querían abrumarte con tanta gente.” Encogiéndose de hombros, ella apartó su mirada evitando mi sonrisa.

“Si, eso es por lo que ellos se fueron, bien,” Burlándome en broma, caminé hacia el sofá; mis labios estaban apretados mientras empezaba a sentarme temblando. El dolor grabado a través de mi cara mientras hacia una mueca, despreciando el hecho de que apenas podía hacer nada sin tener que sentir las consecuencias de mis acciones.

Jadeando ligeramente, _____ corrió hacia mi. Agarrándome bajo mis brazos con cuidado mientras me ayudaba a sentarme en el sofá, ella suspiró, “No puedes hacer eso,” Ella negó con su cabeza, mientras se sentaba en frente de mi, un poco hacia la derecha de manera que podía poner mis pies arriba sobre la mesa. “Te harás daño a ti mismo.”

“No puedo hacerme daño a mi mismo mas de lo que ya he hecho,” Inclinándose hacia atrás contra el acolchado sofá, me relajé en el cuero. Cerrando mis ojos, dejé escapar una profunda respiración antes de abrirlos para ver a _____ mirando hacia abajo a sus manos, mordiendo contra la piel en sus labios, “No estés tan nerviosa, nena.” Era mi turno de suspirar ahora, “Va a ser así por un tiempo pero todo se facilitará con el tiempo.”

“Lo se, yo solo--apesta que no pueda hacer nada para ayudarte.” Encogiéndose de hombros, ella me dio una pequeña sonrisa con tristeza evidente en el camino, no se veía en sus ojos.

“Ven aquí,” Susurré, sacando mi mano para que ella la cogiera, lo que ella hizo en el tiempo de un segundo. Tirando de ella hacia mi con un gruñido, la preocupación brilló en sus ojos pero rápidamente se desvaneció una vez que volví mi cabeza perezosamente parar hacerle frente a la de ella, mis dedos rozaban contra su mejilla, “Relax,” Suspiré.

Inclinándose en mi tacto, ella cerró sus ojos, revelando el hecho de que yo estaba junto a ella, “Te extrañé.” Ella susurró, poniendo su mano sobre la mía.

“Estuviste conmigo cada día desde lo que pasó, ¿cuando me pudiste haber extrañado?” Riendo, me incliné de manera que mi cabeza estaba a escasos centímetros de al de ella.

“Extrañaba que estuvieras en casa,” Agitando sus ojos abriéndolos, ella miró en los míos, dejándome sin aliento. “Extrañaba que tu estuvieras aquí conmigo, en vez de en ese estú*pido hospital,” Ella se quejó con un rodamiento de sus ojos.

Tosiendo una carcajada, volví mi cabeza, cubriendo mi boca por un segundo antes de volverme de nuevo hacia ella, “No puedo decir que no este de acuerdo.”

“Por supuesto que no puedes,” Ella jadeó una burlona respiración, “Porque ellos arruinaban cada oportunidad de que nosotros nos liáramos.”

“¿Puedes culparme?” Me apoyé sobre mi codo, mirando hacia abajo a ella, “Ellos entraban cada maldito segundo que trataba de besarte. Después de la quinta vez, empecé a pensar que ellos nos estaban espiando.”

“Ellos simplemente estaban haciendo su trabajo,” ______ exasperó con una sonrisa, “Tu simplemente no podías resistir la tentación.”

Arqueando una ceja, busqué la sonrisa que tiraba de mis labios, “¿Y que tentación sería esa?”

Moviéndose hacia delante hasta que sus labios escasamente tocaban los míos, ella sonrió arrogantemente, “Yo,” ella susurró, rápidamente retrocediendo antes de que yo tuviera la oportunidad de tomar represalias.

“Eres una jodida provocadora,” Murmuré, disparándole una mirada de desaprobación.

Encogiéndose de hombros a sabiendas, ____ sonrió, “Lo se,” Ella guiñó un ojo antes de ponerse de pie y estirar sus extremidades.

“Ay,” Agarré su mano antes de que ella tuviera la oportunidad de alejarse, “¿A donde crees que vas?”

Girando alrededor para mirarme hacia abajo, su rostro se arrugó en una manera que le hizo lucir insoportablemente adorable, “Para hacernos dos tazas de chocolate caliente.”

“¿Cuantos años tenemos? ¿Cinco?” Reí, su mano se deslizó de la mía mientras ella jadeaba en desaprobación.

“Perdona, pero resultar que me encanta el chocolate caliente. Es el tiempo perfecto para ello también y si no me equivoco, creo que tu le pediste a la enfermera una taza la semana pasada, así que tu argumento no es válido.” Sacando afuera su lengua hacia mi, ella esquivó la mano que se extendía para agarrar la suya. “Ha! No puedes cogerme ahora, ¿Verdad?”

“Por supuesto que no puedo, apenas puedo caminar, como están las cosas.” Declaré una cuestión de total naturalidad.

“Lo se,” Ella sonrió, imitándose a sí misma de antes.

Estrechando mis ojos hacia ella, fruncí mis labios, “Eres una perra.”

“Pero tu me quieres,” Ella rió, agitando una mano con desdén en el aire, “Volveré en cinco minutos. Trata de no hacer nada demasiado estú*pido.” Ella advirtió.

Levantando mis manos hacia arriba en señal de rendición, sonreí, “¿Que podría hacer?”

“Conociéndote, encontrarás algo.” Sacudiendo su cabeza, _____ se alejó, dejándome a mi suerte por mi propia cuenta por el momento.

Inclinándose, me estremecí, obligándome a mi mismo a coger el control remoto antes de enderezarme y encender la televisión, la pantalla se iluminó inmediatamente, mostrando cualquier programa que fue visto por última vez.


______’s Point of View:

Agarrando los lados del mostrador, agaché mi cabeza, tomando lentas y profundas respiración para calmarme. Abriendo mis ojos, miré hacia arriba, obligándome a mi misma a deshacerme de todos mis pensamientos--mis dudas y preocupaciones.

El estaba en casa y eso era todo lo que importaba ahora.

Liberando mi agarre, me dirigí hacia la cocina, donde estaba actualmente la tetera hirviendo. Abriendo mis ojos completamente una vez que me di que la parte superior se estaba moviendo rápidamente, cuando no debería de estarlo, maldije en voz baja, agarrando el mango antes de que mi cabeza pudiera darse cuenta de que estaba demasiado caliente para tocarlo. “Joder,” Dejándolo caer, puse mis dedos en mi boca, chupando en la ahora, piel ardiente. “Jesucristo,” Suspiré con irritación.

“¿Que estas haciendo?” Una voz de detrás me sorprendió mientras yo saltaba, a punto de darme la vuelta cuando me di cuenta de que era Justin de pié allí con sus brazos bloqueándome, evitando que me moviera en cualquier dirección.

“Yo-Yo iba a hacer el chocolate caliente,” Susurré, mordiendo el interior de mi mejilla. Tragando saliva duramente, hice un movimiento de manera que pudiera girarme.

Percatándose de esto, Justin se movió hacia atrás un poco aunque sus brazos se quedaron donde estaban puestos. Haciéndole frente, me quedé sin aliento bajo la intensidad de sus ojos.

“¿Que pasa contigo?” El susurró, “¿Hm?”

“N-Nada,” Negué con mi cabeza, aclarando mi garganta, “Simplemente no estaba prestando suficiente atención y el agua estaba hirviendo mas de lo que se suponía. Agarré la tetera y quemé mis dedos,” Revelando la piel roja de mi mano, Justin escaneó cada uno de mis dedos, poniéndolos dentro de su palma mientras el los tendía en la parte superior de la suya. Lamiendo sus labios, Justin se inclinó hacia abajo, colocando varios besos con la boca abierta en las leves quemaduras, sus ojos nunca abandonaron los míos.

“¿Mejor?” Él susurró con voz ronca, moviéndose incluso mas cerca, de manera que podía sentir el calor irradiando de su cuerpo.

Asintiendo con mi cabeza aturdidamente, miré como Justin se ponía en su total longitud, por encima de mi mientras sus manos agarraban mi cara.

“Justin--” Jadeé, fui silenciada por sus labios presionándose contra los míos. Descansando mis manos contra su bajo vientre, me estiré con mis puntillas para darle un poco de alivio, evitando que se agachara.

Sosteniendo mis caderas, Justin trazó sus labios a través de mi mandíbula y por mi cuelo, antes de moverse hacia mi oreja, “No me mientas,” Mientras yo abría mi boca para reaccionar, Justin me silenció con otro beso, “Hay algo mas que pasa contigo y quiero que pare justo aquí. ¿vale?”

“Justin...”

“Estoy fuera del maldito hospital, estoy vivo, estoy respirando, estoy caminando--”

“Difícilmente,” Murmuré en voz baja lo que no pasó desapercibido.

Gruñendo en ligera molestia, Justin agarró mi barbilla, obligándome a mirar a sus ojos. “No lo hagas. Para con esos putos comentarios. No volví a casa para que tu continuaras abatida. Fui disparado y no hay nada que pueda hacer sobre ello, pero estoy aquí contigo ahora, y eso es todo lo que debería de importar, ¿vale?”

“No es eso, sin embargo. No se exactamente lo que esta mal conmigo.” Encogiéndome de hombros, exhalé, “Supongo que... todo se siente demasiado bueno para ser verdad, ¿sabes? Solo hace unas semanas, pensé que estabas en las últimas y ahora tu estas de pie aquí, en frente de mi...”

“Y nunca me voy a ir, ¿vale? Va a hacer falta mas de una bala en el pecho para matarme.”  Arreglando mi pelo hacia atrás, Justin colocó un cálido beso en mi frente, “Vamos,” Apartándose, el hizo un gesto hacia la tetera, “Quiero mi chocolate caliente.”

Riendo, las horrendas mariposas que atacaban mi estómago, se evaporaron en una sensación de hormigueo, haciendo a mi corazón agitarse. “Vale.”

“Esta vez, sin embargo, creo que deberías de coger una toalla de papel o algo para poder agarrarlo. No quiero que te quemes otra vez.” Sonriendo, Justin se inclinó hacia atrás contra el mostrados, mirando mientras yo le disparaba una mirada, pero yo hice lo que él dijo.

Cogiendo la tetera, vertí el chorro de agua en dos tazas separadas llenas de polvo de chocolate caliente. Mezclándolos con una cuchara, le di una a Justin, sosteniendo la otra mientras tomaba una bocanada del olor del chocolate que hizo a mi boca agua.

“¿Que te parece?” Pregunté mientras tomaba un sorbo, inmediatamente gimiendo por el delicioso sabor.

“Esta bueno,” Él sonrió, lamiendo su labio superior mientras prácticamente tragaba toda la cosa. Sorbiendo una respiración, Justin me miró hacia mi por encima del borde de la taza.

“¿Que?” Reí ligeramente, frunciendo mis cejas mientras ponía abajo la taza en el fregadero.

Encogiéndose de hombros, el caminó hacia mi, poniendo su propia taza al lado de la mía antes de volverse para mirarme. “He echado de menos esto.” El admitió tímidamente, apartando el pelo de mi cara, “Solo tu y yo aquí, solos, sin nadie interponiéndose en el camino.”

“Yo no diría eso.” Sonreí, mirándole hacia arriba, “Puedes gafarlo.”

Llevándome a sus brazos, a pesar del tirón en su pecho, Justin escondió su cabeza en el hueco de mi cuello mientras me sostenía cerca, una sonrisa se grababa a través de su rostro mientras el se acariciaba en mi.

Envolviendo mis brazos alrededor de su cuello, le di un beso, descansando mi cabeza contra su hombro. Dejando a mis músculos relajarse, me aseguré de no poner todo mi peso sobre él.

Frotando mi espalda hacia arriba y abajo suavemente, pude escuchar su respiración incluso hacia afuera, el latido de su corazón bombeaba normalmente.

“Vamos,” Susurré, “Es tarde y probablemente estas agotado. Vamos a llevarte a la cama.” Agarrando su mano, envolví mi brazo alrededor de su espalda, llevándolo lentamente mientras lo conducía fuera de la cocina y hacia las escaleras.

Gruñendo, Justin mordió su labio mientras el subía el primer escalón. “Esta bien,” El habló con voz ronca, “Puedo hacer esto.”

“Mira, acabas de salir del hospital; no deberías de estar esforzándote Justin.” Ayudándole a subir las escaleras una cada vez, nos las arreglamos para llegar a la parte superior.

Abriendo la puerta de la habitación mientras Justin se inclinaba contra la pared, la abrí antes de coger a Justin una vez mas y maniobrar su camino hacia la cama, donde el se sentó con cuidado, sus ojos se cerraron fuertemente mientras el filtraba en una fuerte respiración.

“Pu*to infierno,” El murmuró.

“¿Ves?” Suspiré, “Te duele. Ahora solo, ten cuidado y sigue mi ejemplo.” Envolviendo mis brazos alrededor de su torso, suavemente le acosté en la cama, llevando a sus piernas hacia arriba también. “No deberías de estar haciendo recados tampoco en la oscuridad de la noche y perder toda la energía que te quedaba.

“Estoy bien,” Enfatizó, sus ojos avellana brillaron sinceridad.

“¿Es esa tu palabra clave para “duele como el infierno pero me niego a admitirlo’?” Sonreí, sentándome a su lado. “¿Como esta eso?” Pregunté, refiriéndome a él acostado en el confort de su propia cama. “¿Mejor?”

“Si,” Él susurró.

“Quiero que descanses; quiero que te quedes en esta cama y no te muevas a menos que realmente tengas que hacerlo. ¿Vale?”

Gimiendo, Justin rodó su cabeza hacia atrás, “He estado descansando durante días.”

“No hace daño añadir un poco mas de tiempo, ¿verdad?” Frotando mis dedos contra su frente, eché atrás su colgante pelo. “No les echaste gomina hacia atrás” Señalé.

“Eh, fui demasiado perezoso.”

Sonriendo suavemente, posé mi mano sobre su cintura, inclinándome contra ella. “¿Vas a estar bien?”

“Ahora que estoy en casa,” El sonrió, cogiendo mi otra mano y colocando un dulce eso en la parte superior de ella, poniéndola hacia abajo.

Cogiéndola por encima para desvestirle, empecé a desabrochar su camiseta, subiendo que el estaría mas cómodo en una camiseta y pantalones de chandal que en lo que él estaba llevando ahora. “Te extrañé cada minuto.”

“¿Como pudiste extrañarme si pasé cada minuto en el hospital?”

“Eh, los hospitales me asustan y no son necesariamente los mejores lugares para estar y ni es privado. Extrañé estar solo contigo sin todas las enfermeras vigilándote...” Interrumpiéndome mientras desabrochaba el último botón y ponía los extremos abiertos de la camiseta a un lado, sentí mi respiración engancharse en mi garganta en el momento en que mis ojos se pusieron sobre las cubiertas heridas de bala en su pecho.


Justin’s Point of View:

Mier*da, escupí interiormente para mi mismo en el segundo que capté sus ojos en mi pecho. La manera en que su entera aurora cambió, hizo a mi estómago revolverse. “¿Estas bien?” Murmuré, a pesar del cierre de mi garganta.

Llevando su labio inferior dentro de su boca, pude decir que ella estaba luchando contra el impulso de llorar. Parpadeando dos veces, ______ cubrió mi pecho una vez mas con mi camiseta. “Debería de ir a buscarte tu pijama.”

“No,” Siseé, agarrando su mano antes de que ella pudiera ponerse de pie y la sujete, “Siéntate.” Ordené suavemente.

Caminando hasta que ella se sentó de nuevo, la miré, mi corazón se detuvo ante el miedo en sus ojos. “¿Vas a buscar que?”

Inquietándose, _____ miró a todo menos a mi, “Pijama. Necesitas algo en lo que dormir.”

“Tengo una cama para dormir y una novia con la que dormir.” Declaré lo obvio, tirando de ella hacia mi para que ella pudiera mirarme en los ojos. Cuando ella lo hizo, yo tragué saliva, “¿Que te tiene tan asustada?”

Mirando hacia abajo a sus manos, _____ sacudió su cabeza, levantándose de la cama. “Deberías dormir.”

“¿Que? ¿Simplemente te vas a alejar de mi ahora? ¿Dejándome dormir solo por mí mismo?” Seguí su ejemplo mientras ella caminaba alrededor de la cama.

Volviéndose, ella dejó caer sus hombros, “No, iba a buscar tu medicina, para que puedas ponerla al lado de la cama.”

Cerrando mis ojos, me ordené a mí mismo calmarme, sabiendo que iba a tener que tomar esto lentamente con ella siendo así, esta era la primera vez que algo como esto me había sucedido. “Ven aquí.”

Sin dudarlo, _____ hizo su camino hacia mi, agarrando la mano que yo le había extendido a ella, mientras tomaba asiento en el otro lado de mi. “Justin, no tires de mi, vas a hacerte daño.”

“Entonces colabora. Dime que esta mal.”

“Nada esta mal, tu estas en casa.” Ella se encogió de hombros, mirando alrededor de la habitación.

“Estoy en casa porque quiero estar y tu estas tratando de alejarte de mi.” Haciendo una pausa, lamí mis labios, sabiendo la respuesta pero queriendo conseguir la verdad de ella, “¿Porque?”

“Primero, tu querías que te dejara solo y--”

La miré perplejo, “¿Cuando?”

“En el hospital,”

“_______,” Le di una mirada molesta, “Eso fue solo durante cinco minutos, para que tu pudieras dormir un poco pero ahora, de repente, estas asustada y mirando a todas partes menos a mi.” Dejando escapar un frustrado suspiro, cubrí su mano con la mía, “¿Que es? ¿No te gustan las vendas?”

“Creo que, uhm, yo solo... me asusta.” Ella asintió para sí misma como si ella hubiera encontrado la forma correcta de ocuparse de esto, “Pensar que casi te pierdo.”

“Eso esta detrás de nosotros, ahora estoy bien.”

“Tu no estas bien Justin, recibiste dos impactos de bala en tu pecho.” Ella escupió, sus ojos encontraron los parches en mi con odio en sus ojos.

“Se que las cicatrices no se ven bien, pero las vendas las cubren.”

“No es sobre como se ven; es sobre lo que significan.” Ella siseó en censura. Metiendo hebras detrás de su oreja, ______ frunció su labios hacia un lado, “Uhm, supongo que viví mi vida en negación. Supongo que todo el mundo lo hace, quiero decir, si piensas en todas las cosas que pudieran haber ido mal con alguien al que amas, en todas las diferentes formas que podrías haberlos perdido, creo que te vuelves loco, así que no lo haces. Sabes, tu simplemente asumes que todo va a estar bien y la mayoría del tiempo, tienes razón. Pero entonces tu recuerdas que nada esta presagiado.” Tragando saliva duramente, las lágrimas abrumaron en sus ojos, “Y amar a alguien con todo tu corazón, no puede hacerlos vivir.”

“Pero yo lo hice, Kels, ese es el punto.” Hice hincapié, dándole a su mano un apretón. “Se que las cicatrices son feas y desearía que se hubieran ido, especialmente porque duele mirarlas.” Frotando mi pulgar a través de sus nudillos, le miré fijamente con nada mas que adoración en mis ojos. “Pero es una prueba de que sobreviví, tu me diste algo por lo que vivir.”

Tomándose a pecho lo que yo dije y dejándolo penetrar, ______ levantó mi mano, dándole un suave beso antes de aliviarla con su pulgar, “No quiero hacerte daño.” Ella susurró.

Atrayéndome hacia ella, tomé su cara una vez que ella se apoyó sobre mi parte superior. “No pelees conmigo en esto.” Susurré contra sus labios antes de juntar los nuestros. Pasando las palmas de mis manos hacia arriba y abajo por sus costados, deslicé mi lengua dentro de su boca, inmediatamente encontrando la suya y gimiendo de placer.

Apartándose, _____ miró hacia abajo a mi pecho, sus labios se hicieron un mohín, “No quiero hacerte daño Justin...”

Sonriendo, me incliné hacia arriba, capturando sus labios una vez mas, “¿Parece que estoy sufriendo?” Murmuré, mi aliento chocaba contra ella haciendo que la piel de gallina se erizara en su piel.

“Se supone que no debes de presionarte a ti mismo.” Ella susurró, sus cejas lucharon mientras ella luchara contra sus pensamientos interiores.

“¿Que si prometo no moverme?” Ladeé una ceja.

Sonriendo, _____ se apoyó sobre sus codos, “Quieres decir que yo soy, ¿la que manda?” Ella movió sus cejas, riendo.

“Mas o menos,” Gemí.

“Bien,” Besando mis labios, ella se movió hacia arriba, “Entonces, digo que descanses.”

“No,” Gemí en protesta, tratando de traerla de vuelta hacia mi una vez mas.

“No creo que estés listo para mi todavía.” Ella murmuró bromeando, riendo vertiginosamente mientras me miraba hacia abajo.

“He estado listo por días, deseo a mi novia.” Tirando de su mano hasta que ella cayó encima de mi, ansiosamente le di un beso, un satisfecho gemido vino a su fin. Apartándome, le di un beso en su hombro, “Tu sabes que tu también me deseas.”

“Eres tan engreído.” Ella rió, subiendo de modo que ella estaba recostada sobre sus rodillas.

“¿Que hay que temer?” Reí, “¿Que si te prometo que gritaré si algo empieza a doler?” Levantando mis dos cejas, sonreí mientras _____ me miraba hacia abajo, riendo incontrolablemente.

“¿Que si te hago un trato?”

“Que? ¿Así que estamos negociando ahora?”

“Sip,” Riendo, ______ empezó a desabrochar su propia camiseta, sus ojos nunca abandonaban los míos mientras yo mordía mi labio con fuerza, tratando de luchar contra la urgencia de darle la vuelta, “Solo túmbate allí, no te muevas y no hagas nada justo como tu prometiste.”

Gimiendo, sacudí mis caderas, sonriendo mientras _____ gritaba. “Te prometo que no trataré de--”

“Justin,” _____ me dio una mirada mordaz mientras ella se arrastraba de nuevo encima de mi.

“Ven aquí, hablas demasiado.” Agarrando su codo, le arrastré hacia mi solo para que ella se alejara y recogiera su pelo en una cola de caballo. Conteniendo mi aliento, miré como ella presionaba sus labios por mi camino feliz hasta mis abdominales.

Gimiendo, me coloqué cómodamente, dejándola hacer lo que sea que ella quería, “Si, duele justo allí.”

“¿Justo aquí?” Ella señaló hacia el centro de mi estómago.

Sonriendo, asentí con mi cabeza; sus ojos se clavaron en los míos mientras ella se inclinaba hacia abajo y ponía un beso con la boca abierta en ello. “Oh, eso se siente mejor ahora.”

“¿Que pasa con alrededor de tus cicatrices? Hm? ¿Te duele allí también?” Mirándome mientras ella nivelaba su cara con los puntos cubiertos, mordí mi labio, manteniendo el que auto control que fuera que había perdido.

“Si,” Suspiré.

Acariciando su dedo contra la piel expuesta, ella se levantó sobre mis brazos, sintiendo los músculos contraerse bajo sus dedos mientras ella chupaba suavemente, besándolo suavemente después.

“Jesus ______,” Gemí, agarrándola por las caderas y hundiendo mis dedos en su carne. “Te deseo,” Murmuré, “Ahora.”

“Voy a ir al infierno por esto,” Ella rió contra mi antes de levantarse un poco, quitando su camiseta para que ella estuviera solo en su sujetador y jeans.

“Te veré allí nena,” Gruñí en voz baja, mis ojos observándola. Conteniéndome a mi mismo evitando levantarla en sus espaldas, observé a ______ desabrochar mi cinturón, deslizándolo de mi alrededor, tirándolo hacia el suelo antes de desabotonar la parte superior y abrir la cremallera de mis jeans. Bajándolos por mis piernas, ella empezó a quitarse sus pantalones solo para ser detenidos por mis manos agarrándolos.

Tirándolos a un lado, mantuve mi mirada en la suya mientras los desabrochaba hábilmente por ella, haciendo estallar el botón y arrastrando hacia abajo el cierre, dirigiéndolos hasta que estaban fuera de ella, haciendo que se encontraran con la creciente pila en el suelo.

Agarrando mis manos, _____ las clavó en mis costados, “Te amo.” Ella suspiró.

“Yo también te amo cariño, mucho.” Besando su cuello, entrelacé nuestros dedos juntos, apretándolos fuertemente mientras hacía mi camino a través de su clavícula hacia su otro lado. Dejado ir una de sus manos, la deslicé hacia la curva de mi cu*lo y espalda, hasta que mis dedos se encontraron con la parte trasera de su sujetador. Desabrochándolo de manera que cayó inerte sobre sus hombros, arrastré sus correas hacia abajo.

Cogiendo mi rostro, _____ se inclinó hacia abajo, sus labios inmediatamente encontraron los míos mientras ella gemía, su lengua al instante se enredó con la mía mientras ella la profundizaba, la parte superior de su cuerpo estaba presionándose contra la mía, saltando sus caderas con las mías.

“Joder,” Dije con voz ronca mientras sentía a ella tirar de mis bóxers hacia abajo para que me liberara. Quitando su ropa interior casi al mismo tiempo, clavé mis dedos en su cabello, descansando completamente y tirando de ella en la parte superior, su cuerpo encajaba perfectamente entre mis piernas. Golpeando mis labios contra los suyos en un apasionado agarre, gemí mientras ella mordisqueaba mi labio inferior.

“Se un buen chico y quédate quieto,” Ella susurró, colocándose a sí misma en frente de mi para que yo estuviera directamente en frente de su entrada. Masticando su labio, _____ se levantó por mis hombros antes de suavemente facilitarse encima de mi.

Siseando en total felicidad, tiré mi cabeza hacia atrás en éxtasis mientras ella se llenaba, mi longitud palpitaba por la falta de contacto que sentí en las últimas semanas.

Surcando mis dedos en sus muslos, gemí mientras ____ empezaba a besar mi cuello, lamiendo y chupando en mi dulce punto, encontrándose con mis embestidas con cada tirón y empujón, su cuerpo brillaba con gotas de sudor.

“Te amo,” Murmuré contra sus labios, mis entornados ojos se encontraron con los suyos. Inclinando mi barbilla hacia abajo, me encontré con la suya a mitad de camino, mis labios al instante se conectaron con los suyos.

“Yo también te amo,” Ella susurró, arreglando sus dedos con los míos mientras ella presionaba nuestras manos en el colchón, sintiéndose poco a poco desintegrada.

“Mier*da,” Siseé a través de mis apretados dientes, la fricción entre nosotros estaba en su punto mas alto, mientras ______ jadeaba contra mi pecho, su respiración salía en cortas bocanadas. “Muerde mi hombro cariño, cuando estés lista,” Dije sin aliento.

Tarareando en respuesta, pude sentir su cuerpo lentamente cansarse con cada embestida  con la que ella se encontraba en sincronización conmigo.

Frotando una reconfortante mano hacia arriba y abajo por su espalda, coloqué varios besos en su hombro, “Lo tienes babe, ya casi estamos allí.” Gemí.

“Justin,” Ella jadeó, “Estoy tan cerca...” Ella susurró, escondiendo su rostro de la vista mientras la sostenía contra mi, fijando nuestro ritmo.

Sin una sola palabra, empujé mas hasta que estuvimos listos para dejarnos ir y con una embestida final, _____ clavó sus dientes en mi piel, nuestros gemidos llenaban el aire mientras ella se derrumbaba encima de mi cuerpo.

Frotando su cabello húmedo de la espalda, besé su mejilla repetidamente, “Estuviste increíble cariño.”

Levantando su cabeza para mirarme aunque con ojos cansados, _____ sonrió, “Gracias.” Besándome suavemente, gemí con satisfacción antes de apartarme. Cogiéndola por las caderas, la despegué de mi, su cuerpo inmediatamente cediendo contra el colchón.

Colocando la manta sobre nosotros, ______ besó suavemente la parte superior de cada una de mis heridas vendadas, antes de descansar su cabeza junto a la mía.

8 comentarios:

  1. aa! amo esta novela ! son tan perfectos !

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  2. su camino feliz jaja :3

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  3. amo esta novela, aveces creo que lo que pasa es verdad, pero simplemente es una novela=' ) amo la novela<3 cada dia me da mas motivos para conoser a Justin=' ) a mi Kidrauhl, Forever Belieber

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  4. Es increible ver, como me imagino toda la novela, es lo mejor que eh leido! La verdad, me encanta y la amo!

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  5. Grrr... No sé pero cuando leí eso de que Kels le besaba su "Camino feliz" yo también lo quise hacer xd
    *wwwwww* Sería.... *wwwww* #BieberGasm lol
    Setso every day... Every night.... Aún cuando le acaban de disparar xd looooool

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  6. los amo, no puedo con ellos. si tan solo jelsey fuera real... mi vida estaría casi completa

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