miércoles, 7 de mayo de 2014

Danger's Back - Capítulo 49

Capitulo 49

“She’s not the same person,” - “Ella no es la misma persona,”



“Bueno, bueno. bueno... ¿No es esta la preciosa _____ Jones? ¿Como estás cariño?” Una voz arrulló burlonamente desde detrás.

Caminando más rápido, tratando de ignorarle, _____ chilló en sorpresa mientras alguien agarraba su brazo, tirándola hacia atrás hacia él.

“Tuh, tuh, tuh, ¿no te enseñó nunca tu madre modales?” Él sonrió diabólicamente, “No es de buena educación ignorar a la gente.”

“Déjala ir!”

Volviéndose, el hombre sonrió mientras encontraba a Justin de pie allí, respirando pesadamente como si hubiera estado corriendo una maratón.

“Mira quien finalmente decidió unirse a nosotros,” Él se dió la vuelta para encararle, protegiendo su cuerpo con el suyo mientras la abrazaba fuertemente hacia él.

“Déjala ir,” Él gruño una vez más, “ella no tiene nada que ver con esto.”

“Oh, permíteme no estar de acuerdo,” Él sonrió. “Ves, ella es una trampa amigo, y no me importaría tener un pedazo de esto para cenar. Dime, ¿sabe bien?”

“Hijo de pu*ta!” Corriendo hacia delante, una fuerza le contuvo. “¿Que co*ño?” Él escupió mientras trataba de soltarse, aunque nada pudo hacer. Luchando con más fuerza, solo hizo divertir a los otros mientras varias personas salías de las sombras ahora, uniéndose a la risa del secuestrador de _____.

“Puedes tratar de liberarte todo lo que quieras, ella esta a punto de morir.”

“Justin!” _____ gritó mientras se agitaba alrededor, desesperada por salir de las manos desconocidas que estaban en su cuerpo y dirigirse hacia las familiares que llegó a amar.

“Lo siento, nena, pero Justin está un poco atado en este momento,” él rió mientras se volvía, tirando de ella con él.

“Justin!” Ella gritó mientras se estiraba hacia atrás, las piernas daban patadas en el aire para tratar de aflojar el control en su cuerpo, para que ella pudiera soltarse, pero no importó lo que ella hacía, él era demasiado fuerte para ella.

Estirándose para agarrar sus manos, Justin se esforzó para acercarse más, aunque no importó lo mucho que lo intentaba, era como si estuviera cimentado al suelo.

“Justin!”



No One’s Point of View:

Nadie dijo una palabra mientras abandonaban la casa de Lyndon con prisa, todos los chicos se amontonaban en el coche como si sus vidas dependieran de ello--y en un sentido, dependía.

Justin no podía evitar la sensación que él sentía en la boca de su estómago mientras él no paraba de moverse en su sitio, su corazón prácticamente estaba a punto de caer desde la caja que estaba escondida detrás. Era como si todo su mundo se hubiera detenido y se hubiera estrellado alrededor de él, un sentimiento muy familiar también que había conseguido muchas veces antes, pero esta era diferente--el podía sentirlo.

No era como cualquier otro momento en su vida en el que él sabía a donde se dirigía y con lo que iba a enfrentarse. Él no tenía absolutamente ni idea de lo que había pasado, y una parte de él le gritaba que se volviera y se escondiera de la verdad porque era algo a lo que no estaba destinado a encontrarse. Él no estaba preparado para esto, y sus entrañas lo sabían--simplemente eligió no seguirlo. 

Perdido en el sentido de la dirección, sin saber a donde ir desde aquí en adelante, Justin subía y bajaba su rodilla como un drogadicto metido en el crack; él necesitaba su arreglo, y lo necesitaba ahora.

Él tráfico no ayudaba tampoco.

“A la mier*da esto,” él gruñó cuando ellos se detuvieron detrás de otro coche en un semáforo rojo. Abriendo la puerta, él ni siquiera miró atrás mientras empezaba a correr en dirección del hospital.

Ni siquiera importaba que él corriera cinco millas en recto o que estuviera sudando como un cerdo en el momento en el que él llegó al hospital siempre y cuando llegara a tiempo al lado de ella.

Entrando rápidamente a través de la entrada de la sala de emergencias, hizo una línea recta hacia las puertas dobles que conducían al interior de una ocupada sala de espera.

Las paredes blancas hicieron que su estómago se revolviera por los innumerables recuerdos de él viniendo aquí. Por todas las heridas que él recibió en los últimos años, y el disparo en su pecho de un par de meses atrás, le hizo ponerse malo saber que no era por él o por uno de los chicos que él estaba aquí de nuevo, sin no por ______.

No tenía ningún sentido para él. Por qué tenía que ser ella y no él. Él hubiera tomado su lugar sin ni siquiera pensarlo dos veces, incluso si ello significara que él hubiera muerto en el proceso, porque _____ era el ángel y él era el diablo que había entregado su alma hacía mucho tiempo.

Quedándose allí de pie, rodeado de tantas personas esperando el destino de sus seres queridos, le hizo ponerse malo internamente mientras sus manos empezaban a temblar a cada lado de él ante el pensamiento del destino de _____ siendo determinado.

No se suponía que fuera así. Se suponía que él iba a renunciar a su vieja vida para empezar una nueva. Se suponía que ellos iban a crecer feliz y hacerse viejos juntos, tener hijos en algún lugar de la línea y ahora no parecía que eso fuera a suceder en ningún momento pronto.

Era como si su vida no estuviera destinada a ocurrir en la manera que él esperaba, pero por alguien que quería verle desmoronarse.

Corriendo hacia la recepcionista detrás del escritorio, Justin puso las palmas de sus manos en el mostrador de mármol, respirando pesadamente. “¿_____ Jones?”

“¿Perdone?”

“_____ Jones, ¿En que habitación está?”

Separando sus labios, ella miró hacia abajo a la pantalla de su ordenador antes de que la luz azul de sus irises le mirara hacia él una vez más a través de la lente de sus gafas, “Lo siento, pero el horario de visitas ha acabado--”

“Soy su jodido prometido,” Él dijo rápidamente. “¿En que habitación está?”

“Señor, voy a necesitar que se calme,” el guardia de seguridad dijo mientras se acercaba unos pasos hacia ellos después de notar la interacción entre los dos.

“No me digas que me calme.” Justin hirvió entre dientes, “Te partiré tu jodido cuello en dos.”

Acercándose detrás de él hacia las esposas que él había unido en la cinturilla de sus jeans, él entrecerró sus ojos en su dirección. “Si no das un paso atrás, te alcanzaré--”

“¿Por qué?” Justin dio paso más cerca, su rostro ahora estaban en frente del suyo mientras él ladeaba su cabeza hacia un lado. “¿Hm? ¿Por decir la verdad? Porque te prometo que tendré mis manos alrededor de tu garganta antes de que puedas parpadear.”

“Ella está en la habitación 110,” La enfermera interrumpió rápidamente mientras deslizaba su lengua rápidamente a través de sus labios, poniendo su mano en alto para silenciar al guardia que abrió su boca para tomar represalias, sin querer ser la causa del debacle que había empezado entre los dos si él hubiera esperando más tiempo.

Volviéndose para encararla, Justin hizo un asentimiento de cabeza antes de mirar al hombre que tenía delante y pasar por su lado para ir hacia las puertas dobles que conducían a otra sala mucho más grande que la que acababa de traspasar.

Él estaba en su propio pequeño mundo, y ni siquiera se dio cuenta de que los chicos finalmente habían llegado hasta que él escuchó sus voces diciendo que ellos eran los hermanos de _____, mientras él corría a través de otro conjunto de puertas que conducían a la sala de emergencia de aquellos que estaban severamente heridos haciendo que su corazón diera sacudidas en su garganta.

Doblando una esquina, Justin sintió su corazón detenerse cuando vio a Carly de pie allí con sus brazos cruzados, pareciendo como si hubiera estado llorando por horas. Sus ojos estaban rojos, su nariz era de un tono rojo por todo lo que la había limpiado y sorbido.
Era como si él estuviera atrapado en otra dimensión y no pudiera comprender el concepto de que esto estaba realmente pasándole a él ahora mismo.

Tan pronto como Carly se volvió hacia él, su rostro entero se ensombreció por la mirada en sus ojos. “Justin,” ella susurró dolorosamente, su labio inferior temblaba ligeramente ante la mirada en sus ojos.

Ella sabía que él iba a volverse loco y él tenía la sensación de que iba a hacerlo, también.

“¿Donde está ella?”

“Justin--”

“Carly,” Él sacudió su cabeza, “no lo hagas y simplemente dime donde está.”

Mirando hacia la derecha de la habitación al lado de ella antes de mirar por encima a Justin una vez más, él inmediatamente empezó a caminar hacia la puerta.

“No!” Ella gritó, “No puedes entrar allí.” Bloqueando su paso, ella se quedó de pie con ojos suplicantes, suplicándole que le escuchara, pero él se negó a ceder.

“Muévete,” Él ordenó.

“Ella no es la misma persona.” Ella trató de razonas, “Si entrar allí, no verás a quien esta´s esperando ver. Va a ser alguien completamente diferente. No te hagas esto a ti mismo” ella susurró, “ella no querría que tu la vieras así.”

Apretando su mandíbula, Justin luchó contra la necesidad de dejar escapar un grito de agonía. Él quería nada más que esto fuera una horrible broma, una broma organizada por Carly para joderle mentalmente para vengarse de él por toda la mier*da que él había hecho, pero cuanto más se quedaba allí de pie mirándole a ella, más se asentaba la realidad.

“Ella me necesita” Él logró decir. “Y yo la necesito a ella, y nada que tu digas o hagas va a cambiar eso, así que por última vez, apártate de mi camino.” Empujándola, Justin casi se tropezó con sus dos pies mientras él tocaba a tientas el pomo de la puerta antes de arreglárselas para girarlo y abrirla.

Entrando a la habitación, él casi se derrumbó ante la imagen de ella.

Varios cables estaban cruzados procediendo de cada vena vital de su cuerpo, para evitar que ella perdiera oxígeno. Su cabeza estaba envuelta mientras varios moretones estaban esparcidos en cada centímetro de su piel, las heridas la recubrían como un veterano que había regresado de la guerra. Su ojo izquierdo estaba hinchado y su labio inferior cosido por el ataque que había recibido de un inesperado golpe.

Quedándose allí de pie, Justin pudo ver lo que Carly había querido decir por no reconocer ni un solo rasgo de su amado rostro. Ella estaba golpeada y magullada, deteriorada por una cantidad que él no tenía ni idea, pero era milagroso que ella incluso hubiera sobrevivido a un golpe así.

Con un nudo en la garganta, y sin saber que decir o hacer, él no pudo controlar las emociones que recorrían su cuerpo mientras él tomaba un solo paso hacia ella y cogía su mano en la suya. Sintiendo el calor habitual al que él estaba acostumbrado ahora enmascarado con una frialdad frígida, las lágrimas se filtraron a través de sus pupilas mientras ellas se bajan por la aspereza de su piel.

Con sus hombros encorvados ahora, nadie se atrevió a decir una palabra mientras ellos se quedaban en la puerta mirando como él se rompía delante de ellos. Sacudiendo su cabeza, él usó su mano libre para limpiar su rostro mientras él silenciaba los sonidos con la palma de su mano. “Lo siento--” Él se interrumpió a si mismo en voz baja, “Lo siento, lo siento tanto.”

Cayendo en la silla libre al lado de su cama, él envolvió su mano con las dos suyas mientras firmemente las ponía sobre sus labios antes de dejar caer su frente a su unión. El silencio no salió de escena mientras él estaba sentado allí, fijándose en como él podía haber dejado a esto pasar.

¿Como dejo que las cosas llegaran a este punto? Él nunca lo entendería. Finalmente estaba empezando a dejar que sus muros cayeran, la vida a la que él se había acostumbrado tanto se estaba desvaneciendo lentamente en un recuerdo lejano para que él pudiera hacer nuevos con ella, pero le fue denegada la oportunidad una y otra vez.

Al oír un suave golpe en la puerta, Justin no se atrevió a apartar su mirada de ella mientras las pisadas emergieron desde la puerta, “¿Sr. Bieber?”

Cuando él no se movió, él continuó.

“Soy el Doctor Spinelli, me estaré ocupando de ______ esta tarde. Voy a necesitar que salga fuera unos segundos para que podamos hacerle algunas pruebas. ¿Será eso posible?”

“¿Ella va a estar bien?” Él susurró.

“Vamos a hacer todo lo posible--”

De repente, una silla golpeó con fuerza contra el suelo mientras Justin se ponía de pie antes de girar y agarrarle por el cuello de su camisa, “no vas a intentarlo. Vas a hacerlo.”

“Voy a necesitar que se calme--”

Empujándolo hacia atrás, Justin se quedó mirando venenosamente al hombre que tropezó hacia atrás, casi golpeándole contra la pared por la cantidad de fuerza que puso sobre él. “No,” él advirtió, “me digas que hacer. Haz tu pu*to trabajo en su lugar, y sálvala.”

“Justin, man,” John intervino, sabiendo que esta era una situación dura en la que estar, pero él sabía que Justin no quería que le expulsaran por esto, “no lo hagas.”

“Cállate la pu*ta boca,” Él respondió bruscamente, “nadie te preguntó, joder.”

“Esto es un hospital, Sr. Bieber, y justo como cualquier otro, solicitamos que nuestros visitantes mantengan la calma y si no lo hace, tendremos que forzarle para que salga de esta habitación.”

“¿Sabes lo que es?” Él preguntó, “sentir como si te estuvieras ahogando y no pudieras respirar? ¿Como si toda tu vida fuera arrancada de ti y estuvieras cayendo interminablemente en un agujero oscuro?” Volviéndose para ver a _____, él sacudió su cabeza, “esta chica de allí es todo para mi. ¿Entiendes eso? porque no creo que lo entiendas.” Pasando su mano a través de su cabello, él tiró de los extremos, “he estado aquí innumerables veces, porque yo me merecía estar aquí, porque hice cosas para estar aquí, pero ¿ella?. Ella no merecía esto,” él dijo como si fuera la cosa más obvia del mundo.

“Yo merezco estar tumbado allí,” él se señaló a sí mismo, “yo. Ella no pidió esto. Ella no quería nada de esto, pero ella todavía está pegada alrededor y no tengo ni idea de por qué.”

“Justin, ¿Por que no vamos a tomar algo de aire?” Bruce hizo un gesto hacia la puerta mientras él hacía un gesto para que viniera.

“No,” Él suspiró, su visión se nublaba mientras él se quedaba largo y tendido mirando a los moretones corrompidos a través de su piel, la piel que él había besado antes, la piel que él protegería como si fuera la suya propia. “La jodí. La jodí tanto y no hay vuelta atrás de esto.”

Acercándose para agarrar su brazo, Bruce fue sorprendido por el arrebato que pronto le siguió.

“No me toques!” Justin gritó con todas sus fuerzas, rompiendo los corazones de todos en la sala.

Silencio.

“Se suponía que íbamos a ser felices, sabes,” Él susurró mientras sus ojos miraban por encima a su rostro de nuevo, “se suponía que al final íbamos a ser felices.”

Sorprendido por el primer sollozo que llenó el aire, Bruce se quedó allí de pie estupefacto mientras él miraba la escena desenvolverse delante de él.

Con sus hombros temblando violentamente por todas las emociones que cursaban a través de su cuerpo, Justin se dobló mientras él caía de rodillas en el suelo.

Sabiendo que él tenía que sacar esto de su pecho, Bruce hizo un gesto para que todos salieran, respetuosamente inclinando su cabeza hacia el doctor susurrándole que él necesitaba simplemente un minuto antes de que él estuviera de acuerdo a la fuerza.

“Un minuto, ni un segundo más,” él hizo callar. “Si esperamos más, solo le va a hacer daño a ella al final.”

“La jodí... la jodí tanto,” Sacudiendo su cabeza, Justin se ahogó en su saliva mientras él tragaba con dificultad, tratando de sacudir el creciente dolor de cabeza, pero justo como su corazón, no se iría.

“Escúchame,” Bruce destacó mientras él se ponía de rodillas a su lado, “ella no querría que hicieras esto.”

“Nada va a compensar esto nunca,” él respondió robóticamente, como si él estuviera en un mundo completamente diferente.

“¿Justin?” Sacudiéndolo, Bruce puso sus cejas en un ceño fruncido mientras la realización empezaba a surtir efecto y la preocupación se mezcló en el medio de su estómago. “Justin!” él gritó en un susurro, captando su atención.

Con sus ojos rojos, Justin resopló como un niño que había estado llorando porque él extrañaba a su madre, “¿si?”

“Vamos, man, deja que los doctores hagan su trabajo...” él murmuró mientras se ponía de pie y lo llevaba con él levantándole mientras salían juntos, dejando que los doctores atendieran su trabajo.

Quedándose de pie allí esperando noticias del estado de _____, la conmoción fuera escuchado a la vuelta de la esquina mientras una pareja emergía, luciendo inquietos y agitados; como si ellos no hubieran dormido por días y se acabaran de levantar por primera vez.

Con sus brazos cruzados, Justin no se molestó en reconocer su existencia mientras él mantenía sus ojos fijados en la puerta que ahora estaba cerrada excluyéndolos a todos de lo que estaba pasando en el interior de la habitación.

“Mier*da,” Carly maldijo en voz baja.

Curioso, él se volvió para ver a la madre de ____ y el padre haciendo su camino con Dennis caminando detrás. Entreabriendo sus labios, él aspiró una bocanada de aire, sin haberles visto en tanto tiempo, “oh, no me jodas.”

Tomando esto como su señal para ser la primera en hablar, para que la guerra no se desatara, Carly maniobró su camino a través de los chicos, “hey Sr. y Sra. Jones,” Ella saludó con una pequeña sonrisa que estaba enmascarada con evidente tristeza.

“Oh, cariño,” Echando sus brazos alrededor de su cuello, la madre de _____ hundió su cabeza en la nuca mientras se aferraba a ella como si la vida le fuera en ello. “¿Como está? ¿Está bien?”

“Todavía no lo sabemos,” Carly susurró mientras ella le apretaba una vez antes de apartarse y meter un mechón de su cabello detrás de su oreja, “ellos están todavía haciendo pruebas.”

“¿Cuanto tiempo cuesta?” El padre de _____ intervino impacientemente--como cualquier padre haría en una situación como esta.

“James,” ella replicó mientras le regañaba a sabiendas.

“Maria,” él respondió brusco.

Sacudiendo su cabeza con sus labios presionados en consternación, ella arrugó su frente en evidente desagrado antes de volverse y darse cuenta de Bruce y de los otros de pie lado a lado, “¿Y quienes son estos caballeros?”

No pasó mucho tiempo antes de que la pareja caminara a través del grupo de hombres antes de que sus ojos cayeran sobre Justin.

Congelándose bajo sus miradas, una mueca de disgusto tiró de los extremos de los labios de James, “estos no son caballeros, cielo,” él dijo arrastrando sus palabras, “ellos son monstruos.”

“Suficiente, James,” Maria exasperó, “hablamos de esto.”

“También hablamos de mantener a nuestra hija a salvo pero mira como acabó eso.”

Mordiendo su lengua, ella parpadeó para contener las lágrimas que amenazaban con salir a la superficie mientras forzaba una sonrisa para adornar su labios, arqueando sus cejas en continuación a su pregunta.

“Este es mi novio, John,” Carly le presentó en silencio mientras él envolvía un brazo  firmemente alrededor de sus hombros, atrayéndola hacia él mientras él colocaba un suave beso en el extremo de su cabeza.

“¿Estás asociada con ellos?” James rugió en una risa aguda, “ahora se de donde mi hija sacó sus malas decisiones.”

“¿Perdone?” Ella frunció sus cejas.

“Esperaba más de ti, señorita.”

“Sin ofender señor, pero usted no es mi padre,” Ella respondió de vuelta.

“¿Oh? Él ladeó su cabeza hacia un lado, “¿Entonces quien es él?”

“James!” Maria gritó en estado de shock ante la dureza de las palabras que caían de los labios de su marido.

“Hijo de pu*ta,” John gruñí mientras daba un paso hacia delante justo cuando Carly le detuvo con sus manos en su pecho.

“Para,” Ella siseó, “aquí no, ¿vale? No lo hagas. Estoy bien,” Ella aseguró.

Cuando él le miró hacia ella, ella asintió para confirmarlo, a pesar de que la mirada en sus ojos le decía lo contrario, “lo prometo.”

Apretando sus dientes juntos, él puso sus ojos con fuerza en el padre de _____ mientras él devolvía la mirada, ni una sola vez desfalleciéndose de la batalla de la que estaban actualmente tomando parte, en un juego para ver quien se rompería primero.

Sin embargo, fue de corta duración una vez que la puerta se abrió y el doctor salió, haciendo click en el bolígrafo cerrándolo mientras lo metía en el bolsillo de su abrigo.

“¿Como está?” Todos preguntaron a la vez.

Levantando su mirada, él fue casi sorprendido por la cantidad de personas que ahora estaban amontonados en el pasillo cuando solo momentos antes no había tantos, “hola. No creo que nos conozcamos.” Extendiendo su mano, Maria y James la sacudieron, “Soy el Doctor Spinelli.”

“Soy Maria, la madre de _____ y este es su padre, James,” ella hizo un gesto a su lado mientras él daba un paso hacia delante para ponerse más cerca como si ello fuera a ayudar a los resultados de su hija, incluso en lo más mínimo.

“¿Está bien?” Justin trató una vez más, sus ojos estaban abiertos con desesperación.

Sin saber exactamente como acercarse al asunto, él tragó saliva mientras miraba a todos antes de asentar su portapapeles en su mano, a sabiendas de que esto no iban a ser buenas noticias.

“Ella sufrió un trauma grave en la cabeza, lo que resultó en un desplazamiento de su cerebro, causando que los vasos sanguíneos y las fibras nerviosas se arrancaran automáticamente, añadiendo inflamación,” haciendo una pausa momentáneamente dejando que todo se asentara, el continuó, “el hinchazón presionada los vasos sanguíneos, bloqueando el flujo de la sangre y el oxígeno al cerebro, y por eso ella ha caído en un coma profundo.”

Un jadeo se emitió a través del aire.

“Está muy complicado para ella, se despierte o no. Normalmente, no cuesta más de dos a cuatro semanas hasta que decidamos declarar la muerte cerebral o estado vegetal.”

“Pero ella va a estar bien, ¿verdad?” Dennis preguntó desde detrás del hombro de su padre.

“A este punto, todo depende de ella. Nosotros hicimos todo en nuestras manos para ayudarla a que estuviera cómoda y eso es todo lo que podemos hacer ahora mismo. Lo siento,” él inclinó su cabeza en señal de condolencias, “les haremos saber si algo ocurre.”

Irrumpiendo en un sollozo, Maria se volvió para llorar en el hombro de su marido mientras él se quedaba allí en estado de shock.

Carly lloró en el pecho de John mientras él frotaba su espalda confortablemente a la vez que las lágrimas brotaban de sus ojos ante la posibilidad de que ella no sobreviviera.

Sosteniendo su cabeza en sus manos, Marco evitó a todo el mundo mientras él cerraba sus ojos, tratando de calmarse a sí mismo antes de perder la cabeza, como todo el mundo mientras Marcus se quedaba de pie a un lado, mirando perdidamente a la pared.

“No,” Justin dijo.

Volviéndose hacia él, los ojos de Bruce se entristecieron inmensamente mientras él tomaba unos pasos cautelosos hacia el hombro joven, “Ella va a estar bien.”

“NO!” Él gritó mientras se volvía, haciendo un agujero en la pared a su lado mientras él caía al suelo con Bruce, tratando de levantarle de nuevo.

Y justo así, el sofocante silencio pronto estalló en caos.

“Esto es todo tu culpa,” Dennis gritó, “así que no trates de actuar como si no vieras esto venir.”

Girando rápidamente la cabeza hacia la derecha, el rostro de Justin cayó en dolor y cansancio, esperándose una reacción así, pero todavía con la esperanza de que él no tuviera que escucharla.

Quedándose mirando a su hijo en shock, James se quedó de pie en silencio mientras observaba, sorprendido de que él no fuera el único que pensaba de esa forma, mientras Maria se debatía entre si debía de interrumpir o no pero al igual que cualquier otra persona, él tenía el derecho de decir su opinión--incluso si ella no estuviera totalmente de acuerdo con todo.

“Tienes que entender--” Justin empezó, pero fue interrumpido pronto.

“No tengo que entender nada! Todo está aquí, a plena vista. Eres un monstruo,” él susurró en disgusto consigo mismo por haber confiado en él durante tanto tiempo, “mi padre tenía razón.”

El corazón de Justin se rompió ante las palabras que se escaparon de sus labios, “Den--”

“Me lo prometiste!” Dennis gritó, la ira corría por su cuerpo, algo que nadie había visto nunca en un niño.

“Por favor,” él suplicó, desesperado por que alguien le escuchara.

“Tu dijiste que esto no pasaría,” él instó, “tu prometiste que la mantendrías a salvo y te creí,” sus ojos llenos de lágrimas se encontraron con los suyos en incredulidad, “confíe en ti--te defendí.”

“Lo se, y lo siento,” él susurró en una voz quebrada, pero Dennis no lo iba aceptar. Ya no.

“Ahórratelo,” él habló a través de dientes apretados, “nada que digas o hagas va a arreglar esto.”

“¿Crees que no lo se?” Justin habló en justificación consigo mismo y sus opciones, “¿No crees que no se que esto no puede ser arreglado?” Él espetó.

“Dennis,” Carly se acercó para tratar de clamar al chico antes de que esto se fuera de las manos.

Todavía había mucho que nadie entendía de esta vida, y ella no iba a quedarse de pie allí y dejar que Justin obtuviera la reacción de todo ello.

“No lo hagas!” Él espetó, “No soy un niño pequeño ya, Carly,” él dijo entre dientes. “No puedes hacer que esto mejores dándome un abrazo y diciéndome que va a estar bien, porque tu y yo sabemos que eso es un montón de mentiras.”

“Vamos, niño--” Marco empezó pero fue interrumpido pronto por la dureza que vino de él.

“Mi hermana está luchando por su vida ahora mismo!” Él gritó, su rostro completo estaba rojo por la cantidad de furia que él sentía hacia todo el mundo en la habitación-- incluso hacia sus padres, “así que no me llames niño, cabr*ón!”

“Dennis, cariño,” Maria susurró suavemente mientras ella se acercaba hacia él a la vez que frotaba sus hombros reconfortantemente, “Por que no entras dentro y le hablas a _____, ¿vale? Estoy segura de que a ella le encantaría saber de ti.”

De repente, sus oídos se agudizaron con interés mientras se volvía con los ojos ligeramente abiertos, “¿Crees que ella me escuchará?”

“Ella puede que no sea capaz de responder, pero estoy casi segura de que te puede oír.”

Asintiendo con su cabeza, él disparó una mirada en la dirección de Justin antes de empujarle al pasar a su lado para marcharse hacia la habitación.

Enderezándose, ella se volvió para mirarle mientras ella asentía hacia el pasillo abierto, “Creo que deberíamos de hablar.”

Estando de acuerdo en silencio, él suspiró, sabiendo que él no podía obviar lo inevitable más. Esta conversación tenía que suceder, y él se preparó para escuchar cada blasfemia de todos ellos.

“Maria,” James agarró su mano, “No creo que esto sea una buena idea.”

“No te preocupes,” Ella dijo mientras se apartaba y le daba un beso en su mejilla. “Ve a confortar a Dennis, estaré allí en un segundo.”

A pesar de no querer hacerlo, él hizo lo que fue dicho, desapareciendo en la privacidad de la habitación de su hija.

Conduciendo el camino hacia la pequeña cafetería, ella tomó un asiento al lado de las máquinas expendedoras, esperando que Justin siguiera su ejemplo.

Cayendo en el asiento vacío de su lado, Justin tragó saliva con dificultad mientras él esquivaba sus ojos, sin ser capaz de hacer frente a la decepción.

“Traté de hacer lo correcto por ella, ya sabes,” Él rompió primero justo cuando ella abría su boca para decir algo.

Mirando hacia él, ella se quedó en silencio, esperando oído que más tenía que decir.

“Lo juro, que lo hice. Quería nada más quedarle todo lo que ella siempre quiso,” su visión se emborronó mientras él parpadeaba hacia sus zapatos, una silenciosa lágrimas cayó aterrizando en sus zapatos.

“Justin--”

“Esto no se suponía que iba a pasar. Iba a dejar todo, iba a dejarlo todo solo por ella.”

“Justin...”

“Y ahora ella está allí dentro luchando por su vida por mi culpa.”

“Cariño,” ella se acercó para agarrar su mano, “no es tu culpa.”

“¿Como puedes decir eso?” él espetó, sus ojos se encontraron con los de ella, “tu hija está pendiendo de un hilo por mi culpa! Todo esto pasó porque ella era mía!”

Negando con su cabeza, ella se aferró en la mano de él con más fuerza, “eso no es lo que quiero decir. Mira, lo que haces para ganarte la vida, ¿eso está mal? Mucho. En muchos niveles, pero, ¿sabías que esto iba a pasar?”

Cuando él no dijo nada, ella agarró su rostro, obligándole a mirarle, “¿lo sabías?”

“No,” él respondió, desconcertado de que ella incluso hablara en serio para preguntarle eso.

“Exactamente. No voy a justificar que si, parte de la razón por la que mi hija está aquí es porque tú estás asociado con ella, pero tu no pediste eso. Nadie lo pidió.”

“Debería de haberla dejado en paz,” él susurró. “Esa noche, cuando ella... cuando yo la conocí. Debería de simplemente haberla dejado en paz, pero fue egoísta y egocéntrico y solo me preocupaba por mí mismo. No pensé en las consecuencias. Ni siquiera pensé en que podría enamorarme de ella.”

“Pero lo hiciste,” ella acarició si mano suavemente.

“Pero lo hice,” el repitió con un una leve burla de incredulidad consigo mismo, “y en ese momento pensé que era lo mejor que me podía haber pasado a mi-- ella era lo mejor que pudo haberme pasado a mi...” mirando hacia abajo a sus entrelazados dedos, él cerró sus ojos visionando su preciosa sonrisa antes de que se desvaneciera, “pero ahora que pienso en ello,” él levantó su vista para mirar fijamente a la pared opuesta de donde él estaba sentado, “y todas las señales estaban allí.”

“La primera vez que ella salió herida por mi culpa, debería de haber sabido parar, que esto iría demasiado lejos, pero mi orgullo se interpuso en el camino y me negué a perderla porque no es justo. ¿Por qué debería de sufrir porque me enamoré de nuevo? ¿Por qué debería de recibir la patada de todas las personas en el mundo?” riendo sin humor para sí mismo, él sacudió su cabeza por enésima vez esa noche, “y luego me di cuenta de que la gente como yo no tiene finales felices.”

“El mundo tiene una divertida manera de vengarse de nosotros, pero no podemos dejarles  vernos caer,” ella envolvió un brazo alrededor de su figura, descansando su barbilla suavemente en su hombro.

“Si...” mirándole por encima, él lamió sus labios, frunciendo su ceño, “¿por que no me odias?”

“Hiciste a mi hija la chica lo más feliz que la he visto. ¿Como podría odiarte por eso?”






Después de una hora de conversación, Maria se había unido a su marido e hijo en la habitación de _____ para pasar algo de tiempo con su hija para asegurarle de que ellos estaban allí y no iban a dejar su lado.

Tan pronto como ella vio el daño, sin embargo, ella cayó sobre ella como un escudo, sus instintos maternos golpeaban mientras ella sollozaba incontrolablemente en el hombro de ella, llorando “mi bebé” una y otra vez como si sus lágrimas fueran a curar las heridas de su cuerpo--pero nunca lo hicieron.

No tomó mucho tiempo antes de que todo el mundo se viera obligado a marcharse, a parte de Justin, quien Maria había exigido a los médicos que le dejaran quedarse a pensar de la incomodidad de su marido.

Quedándose de pie fuera de la habitación con sus manos metidas profundamente en los bolsillos de sus jeans, el miró a través de las ventanas, entre las rendijas de las persianas, mirando como Maria se acercaba y metía el pelo de _____ detrás de su oreja mientras le cantaba nanas.

Sentado en una silla, Dennis se había quedado dormido sosteniendo la mano de _____ mientras James miraba como su esposa le daba una serenata a su hija.

Volviéndose al ver una sombra escondida a través de las pequeñas aberturas de las persianas, él se movió para ver a Justin de pie allí e inmediatamente su sangre se heló. Acercándose, sus ojos se encontraron con los de Justin, los suyos ardían con fuego--un que estaba en ninguna parte cerca a la muerte, mientras su mandíbula se cerraba furiosamente ante el odio que él sentía por el joven del que ______ se había enamorado.

Agarrando el pequeño gancho cerca de la derecha que estaba unido a las cubiertas de las ventanas, él lo retorció, bloqueando la vista de las personas de fuera, a propósito asegurándose de que Justin no tenía manera de mirar a su hija.

Habiendo esperado esta reacción, su propia mujer le advirtió de la ira de su marido que estaba experimentando actualmente, aunque ella le aseguró que iba a acabar lo suficientemente pronto, Justin se dio la vuelta.

Sin querer causar más de una escena de la que ya había causado, él agarró la silla y se sentó en ella, preguntándose si el sueño le consumiría o sus pensamientos le comerían vivo hasta que él no pudiera soportarlo más y se desmayara.

De cualquier manera, las pesadillas eran todo a lo que él se acostumbró y no era una gran sorpresa para él cuando Justin se encontró a sí mismo dando vueltas durante el resto de la noche, gritando a _____ mientras un par de hombres la apartaban en el interior de la oscuridad, al mismo tiempo que ella le llamaba a él, suplicándole que la salvara.

Y no importa lo que él hiciera, él no podía alcanzarla.



A este punto, creo que sobran las palabras. Todo está prácticamente dicho en el capítulo. Siento una pena y una angustia terrible por Justin. Toda la vida llevando una banda, luchando contra todos, presenciando desgracias, y justo cuando va a dejarlo todo por Kelsey, se la “arrebatan”. Todos se ponen en su contra, y apenas le dejan verla estando luchando por su vida.

Dolor, y angustia. Esas dos palabras resumen este capítulo a la perfección. No se vosotras, pero yo cuando leí por primera vez este capítulo en inglés, sentía una angustia en mi estómago, porque me sentía en la piel de Justin. Nadie me dejaba explicarme, me sentía culpable porque la persona a la que quería estaba más muerta que viva, y... acabé llorando.

En realidad, ahora mismo no tengo palabras. Os puse en mi twitter el link del video que hizo Adriana para la recta final de Danger’s back. He intentado hablar con ella, pero no he podido al final. No se muy bien lo que pasa con danger, pero ella dijo en su twitter que el día 26 de Junio iba a acabar. Aunque no entendí bien, porque se supone que ella dijo que quedaban más de veinte capítulos para el final y es impossible que suba tanto en estos dos meses. Así que intentaré hablar con ella y cuando sepa algo seguro os digo ;) Siempre lo digo en mi twitter, por aquí no me suelo pasar, solo para subir. -Mi twitter está al final de este mensaje, por si queréis enteraos.-

Dicho esto, Adriana dijo esto “Esto es básicamente el final de las series, y todo va a ser simplemente un “lío” a partir de aquí. Si queríais acción, aquí la tenéis.

Solo para aclarar unas cuantas cosas, en caso de que haya habido alguna confusión: Kelsey ha sido reducida a un coma. Un coma es donde no te puedes mover o hablar, pero todabía estás viva. Ella necesita ayuda para respirar, por ello los tubos de su boca, pero a parte de eso, ella está muy viva, aunque los doctores no saben si se va a despertar o no.

El principio que está en italics -cursiva- es el sueño que acaba teniendo Justin al final.
Debería de haber unos 25 capítulos o más si todo se produce de la manera que tengo planeada. Pero conociéndome, probablemente salga con algo para añadir o quitar, así que podrían ser más.”

Dicho esto, espero que hayáis disfrutado el capítulo. Y me disculpo de nuevo porque no he tenido tiempo estos días de traducir, aunque no me he retrasado semanas, estos últimos días tenía cosas que hacer y no he podido traducirlo antes. Llevo toda la tarde traduciendo y quería subirlo ya para no haceos esperar más, así que siento si hay alguna falta de ortografía. Espero haberlo hecho bien ;) GRACIAS POR TODO!

PD: En la página web de Danger, he añadido encuestas para que digáis el final que creéis que va a tener danger’s back y quien creéis que va a morir. Me cuesta mucho decirlo, pero siento que va a ser muy duro. Gracias por todo chicas. LOVEU!




@ItsGoBieber