“Where
are we going?” – “¿A dónde vamos?”
Justin tenía los
labios apretados, en parte por la diversión. “Estoy impresionado, shawty. No
pensé que fueras así.” Justin se inclinó de lado en su coche, poniéndose cara a
cara conmigo, siendo astuto, con una sonrisa burlona mostrándose en su cara.
Me burlé. “Bueno,
ahora ya lo sabes.” Le lanzó una falsa sonrisa.
Miré hacia abajo,
echándole un vistazo. Finalmente llegué a ver lo que llevaba puesto, y no voy a
mentir, él se veía bien. Llevaba una camiseta blanca con cuello en V con una
chaqueta de cuero cubriendo su cuerpo, unos jeans negros ajustados y unas supra
negras.
“Me estas echando un
vistazo, por lo que veo?” Miré hacía arriba para verlo, me miraba con una
mirada burlona.
Rodé los ojos. “No”
Miré lejos, avergonzada de que me hubiera descubierto.
Se lamió los labios,
pasando sus ojos por arriba y abajo de mi cuerpo. “Tu no te ves mal.”
Me miró a mí, al ver
que yo llevaba un par de jeans ajustados con una camiseta y un suéter, con un
par de zapatillas de ballet (bailarinas).
No sabía si estaba
hablando en serio o simplemente estaba bromeando, pero tomé el cumplido que me
había dicho de todas formas, agradeciéndole algo aturdida.
El simplemente se
rió, enviando un escalofrió por toda mi espalda. “Sube al coche, baby.” El hizo
un gesto con su cabeza volviéndola hacia el coche que parecía el batman mobile.
El había cambiado su coche y ni siquiera hacia una hora que lo había visto.
Iba a preguntarle de
donde lo había sacado, pero algo dentro de mí me advirtió que no lo hiciera.
Ni siquiera me di
cuenta de que el ya estaba sentado dentro de su coche, hasta que tocó el claxon
de su coche, haciendo que me sorprendiera y saliera de mi trance.
Justin sacó la cabeza
fuera del coche, su codo colgaba del borde de la ventana. “Vas a entrar o
que?.”
Le miré a él, a su
coche y a mi casa. No era una decisión muy difícil de tomar. Mirando hacia
atrás de él, me acerque al lado del pasajero de su coche. Inclinada hacia abajo
para tirar de la palanca, me di cuenta de que no había ninguna manija para
tirar.
“¿Que te esta tomando
tanto tiempo?” Dijo Justin a través de su ventana.
“¡Cállate! No hables
tan fuerte, mis padres te escucharan y no se como abrir esta cosa!” Susurré
fuertemente para que me escuchara.
El se rió entre
dientes. “Basta con hacer clic en el botón lateral.”
Miré hacia abajo,
tratando de encontrar el botón del que estaba hablando. Cuando lo encontré,
rodé los ojos antes de abrir la puerta y me senté en el interior del coche.
“Ya era hora”. Dijo
en broma.
“No es mi culpa que
tu coche sea tan difícil!” Susurré a la defensiva.
El sonrió, acelerando
el coche antes de salir de la ranura en la que estaba estacionado y salimos a
la carretera.
Pocos minutos habían
pasado, tarareaba mi propio ritmo mientras tamborileaba con mis dedos en el
borde del apoyabrazos debajo de la ventana. Miré a través del cristal,
preguntándome donde estábamos. Fue entonces cuando me di cuenta de que ni
siquiera sabía a donde íbamos.
“¿A dónde vamos?” Me
volví para mirarlo.
Justin simplemente se
echó a reír, sacudiendo la cabeza.
Fruncí las cejas
juntas. “¿Qué es tan gracioso?”
El no me hizo caso.
En su lugar, solo se reía. Una vez que se calmó, me miró a mí. “¿No aprendiste
de la última vez que me preguntaste?” Me dejó de mirar volviendo su vista hacia
la carretera.
Algunos momentos que
ocurrieron hoy volvieron a mi cabeza y me acordé cuando le estaba preguntando
en repetidas ocasiones a donde me llevaba, pero el como era un cabezota, nunca
me respondió.
Me encogí de hombros.
“No, porque sigo siendo muy curiosa.”, Sonríe con orgullo, haciendo que el
riera una vez mas.
Sentado en el asiento
de cuero de su coche, apoyó su rodilla izquierda en el volante, utilizándola
para dirigir el coche mientras su otra pierna presionaba el acelerador.
Haciendo uso de sus tres dedos de la mano izquierda para sostener el volante y
asegurarse de que no perdía el control, comenzó a buscar en el bolsillo derecho
de su chaqueta de cuero. Agarró un paquete de cigarrillos y un encendedor, lo
deslizó fuera de la caja, aprisionándolo con sus labios antes de encenderlo.
Tomó unas bocanadas para asegurarse de que estaba encendido y guardó la caja en
su bolsillo.
Al deslizar el
cigarrillo entre sus dedos, colgaba su brazo izquierdo en el borde de la
ventana, despegando la rodilla del volante. Puso su cigarrillo entre sus
labios, absorbió el humo del cigarrillo mientras lo mantenía por unos momentos
en su boca antes de echarlo haciendo un anillo perfecto de humo, que al
instante se extendió por todo el coche.
Negué con la cabeza.
Este chico iba a conseguir que nos matáramos por la forma en la que manejaba y
la cantidad de atención que ponía sobre ese maldito cigarrillo.
Estaría mintiendo si
dijera que no encontraba eso sexy, porque lo encontraba. Odiaba admitirlo, pero
todo lo que hice era admitir que era caliente lo que hacía. Muy a mi pesar, por
supuesto. Fue entonces cuando me di cuenta de que estaba en un coche con un
asesino, una vez más.
En ese momento, me
vino a la cabeza cuando esa misma noche me había sentado por primera vez en el
mismo coche con él.
“¿Cómo voy a saberlo?
Estoy en un coche con un asesino.”, rodé los ojos y crucé los brazos en mi
pecho.
“¿Me vas a reprochar
eso cada vez que abro la boca para decir algo?” Gruñó, su voz era profunda y
sus ojos se tornaron oscuros.
Sentí mi estomagó
como se revolvía por el sentimiento de culpa. Supongo, que lo juzgue con
demasiada rapidez. Lo se, el mató a alguien y él era probablemente uno de los
chicos mas bipolares que había conocido en mi vida, pero, todavía no tengo
derecho a juzgarlo porque no sabía porque había hecho eso.
Supongo que se puede
decir que estaba intrigada por él, y impresionada porque me había dicho en su
casa que en realidad me iba a dejar que me fuera a casa.
Le miré, intentando
encontrar imperfecciones en su rostro, que no existían.
“¿Qué estas mirando?”
Se encogió de hombros mientras mostraba una sonrisa.
Negué con la cabeza.
“Nada.” Aparté la vista torpemente.
“Sabes que puedes
tomarme una foto. Te va a durar mas tiempo.”
Yo simplemente rodé
los ojos.
El sonrió, mirando
hacia atrás de la carretera mientras tomaba otra bocanada de su cigarrillo.
Si me preguntas
porque accedí a ir a alguna parte con él, y porque entré en su coche, no tengo
ninguna respuesta, porque para ser honesta, realmente no sabía la razón por la
que había hecho eso.
“Te voy a llevar a
comer.” Justin habló una vez mas, refiriéndose de nuevo a la pregunta que yo le
había hecho antes, mientras mantenía sus ojos en la carretera. Podía sentir la
sonrisa tirando de sus labios. “¿Esta bien?” Llevó sus ojos hacia mí.
Mi estómago se
revolvió nervioso. “Claro.” Me encogí de hombros despreocupadamente, como si no
me importara, pero la verdad si que me importaba.
Otro pensamiento vino
a la mente y, como siempre, la palabra se encargó de salir de mis labios antes
de que tuviera la oportunidad de evitarlo. “¿Es una cita?” Mentalmente maldije
las palabras que volaban de mi boca.
El sonrió. “Solo si
tu quieres que lo sea, nena.”
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ResponderEliminare la nove mas increíble es la 2da vez que la leo .... LA AMO
ResponderEliminarYo ya es la 7º vez que la leo...ya me se los capítulos de memoria.
Eliminaresta es una de mis novelas favoritas que he leido de justin,la mejor,si echan el libro lo compro.
ResponderEliminar♥ me encanta
ResponderEliminarODIO ENAMORARME DE LAS NOVELAS PEOR LO QUE MAS ODIO ES ENAMORARME DE LOS PERSONAJES Y ESO ME PASO HOY
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